Ánimo en los puertos

Soluciones para movimiento de cargas se diversifican en los terminales brasileños, orientadas por conceptos tecnológicos que ofrecen mayor capacidad operativa y exactitud

Considerando las dificultades que la industria enfrenta en Brasil, se puede decir que el segmento de equipos portuarios vive en un oasis. O, hasta mismo, en una isla propiamente. A pesar de no poseer líneas locales de producción de esos equipos, el país se muestra promisor para el segmento que – de conformidad con un escenario de caída casi generalizada en las ventas de máquinas – puede registrar crecimiento significativo este año. La explicación, según M&T recibió de ejecutivos de empresas líderes de este mercado, es el flujo incesante del modal portuario que, incluso, demanda una actualización tecnológica continuada de los operadores (lea materia a partir de la pág. XX).

En Terex Soluções Portuárias (TPS), por ejemplo, que afirma detener mitad de este mercado en el país, las perspectivas son positivas al punto de la empresa apostar en la introducción de tecnologías y estudiar nuevas inversiones para impulsar su actuación, hasta con la posibilidad de nacionalización de productos. Algo que, por cuenta de la coyuntura de desafío, sigue siendo más raro en otros sectores.

Pero existen buenas razones para tanto. El porcentual de participación de la división en los negocios del grupo sigue aumentando a cada año, siendo que ya alcanzó el 30% y tomó la punta de entre las áreas de la marca estadunidense en Brasil (que es notable, considerando que los demás nichos atendidos por el grupo incluyen máquinas versátiles como grúas, plataformas de trabajo aéreo, puentes y grúas tipo pórticos rodantes y equipos para construcción, además de soluciones para energía y utilities).

Tal crecimiento es fundamentado en números sólidos. De forma retrospectiva, TPS ya comercializó 650 unidades de equipos portuarios en el país, incluso manipuladores telescópicos y soluciones de grande porte para clientes como Libra y Fospar. Tres resultados animan la división a seguir más allá, en un esfuerzo de popularización de tecnologías más avanzadas y, hasta mismo, cambios logísticos importantes. “Estudios siguen siendo realizados en el sentido de tenerse una base de producción más próxima de nuestro mercado, para tornar viable la venta de equipos mayores”, comenta João Pensa, sénior manager de TPS, sugiriendo que, muy brevemente, la empresa puede abrir una nueva unidad fabril en las Américas para contornar costes muy altos de flete, una vez que los equipos provienen de China y de las demás fábricas en Francia, Italia y Alemania, que poseen dos unidades de producción. “No puedo abrir nada todavía.”

PORTAFOLIO

Apoyada desde hace dos décadas por las empresas Equiport y TFD (Terminal Full Dealer), TPS apuesta que, independientemente del escenario macroeconómico, seguirá creciendo por encima del mercado. Primero, porque, como destaca el gerente, es notable la necesidad de inversión por parte de los clientes brasileños. “El sector sigue mejorando de forma clara la eficiencia de las operaciones con la adquisición de equipos más modernos”, afirma. “Existe una necesidad de rever procesos y buscar nuevos negocios, siendo que los clientes se encuentran visiblemente más agresivos en este sentido.”

Asimismo, la devaluación del real favorece las exportaciones, teniendo el modal portuario el principal canal de salida. Internamente, también el Reporto (Régimen Tributario para Incentivo a la Modernización y a la Ampliación de la Estructura Portuaria) – que está previsto para terminar en diciembre – sigue estimulando la adquisición de equipos con la exención tributaria. “Hay la tendencia de tomar este punto para el repuesto de flotas aún este año”, dijo Pensa, añadiendo que, en función de la necesidad de mejoría de productividad de los puertos, el gobierno no debería realizar cambios drásticos en el programa. “Pero, antes de más nada, el sector espera que sea renovado, porque la diferencia es grande”, completa. “Al menos es lo que se oye en el mercado, esa es la expectativa. Pero, tal no está bajo nuestro poder.”

La síntesis del avance de TPS tal vez sea más bien expresa en la expansión continuada del portafolio, que actualmente abarca 16 familias de productos para movimiento de carga en terminales portuarios. Es importante recordar que desde su fundación (en 1968), Terex sigue creciendo, de forma mayoritaria, por adquisiciones selectivas. “La división de soluciones portuarias fue creada con éxito de marcas individuales, como Gottwald Port Technology, que hoy día, integra esa división”, dijo Pensa. “Tal permite ofrecer soluciones completas, es decir, todos los equipos necesarios en una operación portuaria, incluso simulaciones y emulaciones.”

El especialista se refiere a una tendencia en el sector, que la empresa emprendió con la reciente adquisición de dos desarrolladoras de software. Se trata de una simulación en 3D desarrollada por TBA – por señal, incorporada por Terex en 2011 – y que crea un terminal virtual de contenedor en el cual son insertados todos los equipos necesarios a la operación, tornando viable proyectos de capex (capital expenditure), cálculos de costes operativos y operatividad de todas las funciones de las máquinas. “También aquí en Brasil ya es visible una apertura de la cultura de automación en este segmento”, destaca Pensa. “En el exterior, los puertos de Long Beach o de Róterdam, por ejemplo, ya son totalmente automatizados.”