¿Ciclo o saturación?

Expertos comentan los posibles motivos para el frenazo abrupto del segmento, trazando perspectivas para el mercado brasileño en los próximos años

Tras un período de sólido avance – que clasificó el país como uno de los principales hot spots internacionales para dichos equipos –, es la primera vez que el sector de plataformas de trabajo aéreo (PTA) no crece en Brasil. En 2014, fueron comercializadas 5.950 máquinas, en comparación con 7.900 en el año anterior (una reducción de casi un 25%, según el Estudio Sobratema del Mercado Brasileño de Equipos). Como siempre, todas importadas.

Antes de eso, el mercado seguía creciendo con altas tasas, con un promedio del 30%.  Eso se mantenía por lo menos desde 2006, cuando las plataformas empezaron con popularizarse en el mercado brasileño. Dicho histórico reciente hizo con que el frenazo abrupto del sector se volviera todavía más alarmante que en otros niches, a pesar de muchas áreas de la industria han presentado rendimiento inferior al esperado en 2014. Este reportaje de M&T incluye algunos argumentos para ayudar con entender lo que trabó el crecimiento del sector, proyectando las expectativas de los players para los próximos años.

AÑO ATÍPICO

De salida, no hay motivos para desesperación. De hecho, según Paulo Esteves, director de Solaris, “mirando hacia el futuro, no existe cualquier preocupación con el potencial de ese negocio”. Eso porque, según el executivo, 2014 realmente fue un año atípico para el sector, siendo que la retracción en el volumen de ventas fue el resultado – al menos en parte – de la realización de la Copa del Mundo y las Elecciones, dos eventos que han inmovilizado el sector productivo. En el caso de las Elecciones, hubo la añadidura de una considerable incertidumbre política, que represó inversiones programadas. “Después, han surgido las denuncias de corrupción en Petrobras, empresa que lidera una buena parte de las inversiones”, dice Esteves. Además, los proyectos de Vale – otra ancla del mercado – fueran paralizados.

Adicionalmente, la situación económica también estancó otros sectores importantes para la demanda de plataformas aéreas, constituidos por centros de compras, galpones logísticos y edificios comerciales. Según Esteves, solamente en la parte de centros de compras, muchos de los nuevos emprendimientos fueron postergados, debido al no cumplimiento de la tasa de ocupación prevista en otras obras recién-inauguradas. “Añadiendo eso al aumento de la tasa de cambio (hay que recordar que todas las plataformas comercializadas en Brasil son importadas), resulta fácil entender que el escenario económico realmente no fue bueno”, evalúa.

Pero, en la visión de Esteves, el factor que tal vez haya pesado más fue el temor con la posibilidad de cambio en la tasa de importación por el ex-tarifario en 2013. Eso acabó por no ocurrir, pero muchos fabricantes – alarmados con el posible aumento – tendrían importado más máquinas que el necesario, inflando artificialmente los números de aquel año e, inversamente, aliviando un poco el tétrico escenario vivido en 2014.

En el lado del consumidor, o sea, empresas de alquiler de equipos, quiénes son  responsables por más del 90% de dicho mercado, también hubo un aumento representativo de competitividad, con el surgimiento de empresas menores para atendimientos regionales.

Lo que pasa es que dichas empresas trabajan con tasas de ganancias distintas, lo que también les permite operar con precios diferenciados de alquiler. Eso, en la evaluación de Esteves, influyó profundamente en el mercado, reduciendo los valores del alquiler en aproximadamente un 15%. “Hoy, dichos valores no suportan una operación saludable. Sabemos que el mercado se acomodará, pero mientras eso no ocurre, habrá un exceso puntual de máquinas”, afirma. “O sea, en 2012 y 2013 hubo más compras de lo que era necesario, siendo que parte de ese parque debería ser usada en 2014, lo que también explica el menor volumen de ventas de máquinas nuevas."

El ejecutivo acredita que el mercado se presentará más estable en 2015, con un volumen de importación muy semejante al de 2014, recuperándose en la secuencia. “para los próximos años, la tendencia es de crecimiento, porque tenemos un mercado entero para desarrollar en Brasil, lo que solamente refuerza las proyecciones positivas para las empresas bien profesionalizadas en ese negocio”, dice Esteves.